La huella digital hace referencia al rastro que dejas al navegar por internet, al entrar en una página web, comentar en redes, dar me gusta o compartir una publicación. También incluimos subir contenido a internet o almacenarlo en lo que conocemos como «la nube».
Todas estas acciones tienen un impacto de energía y por tanto, un impacto ambiental, puesto que para realizarse y mantenerse necesitamos que los grandes centros de datos estén trabajando sin descanso. Este trabajo por parte de los centros de almacenaje producen grandes toneladas de gases de efecto invernadero. Tanto es así, que se estima que en las próximas décadas, la huella de carbono digital podría llegar a igualar la huella producida por el transporte.
Cada vez estamos más interconectados y cada vez nos resulta más cómodo y práctico llevarlo todo a un clic de distancia con nuestro móvil. Pero no debemos olvidar que a medida que aumenta la cantidad de archivos en la web, las plantas de almacenamiento de datos deben crecer para poder abastecer la demanda y funcionar sin problema. Hemos pasado de tener solo seis centros de datos en España hace más de veinte años, a llegar a construir más de 36 nuevos espacios dedicados a ello en los últimos años.
¿Significa eso que tenemos que volver a comunicarnos como hace treinta años?
No necesariamente, pero si tenemos en cuenta los datos actuales sobre nuestro consumo, podemos reducir nuestra huella digital de manera muy significativa haciendo pequeños cambios en nuestra forma de comunicarnos.
Enviar unos 65 correos electrónicos equivale a conducir un kilómetro en coche, mientras que eliminar 30 correos pueden ahorrar hasta 222W, equivalente a una bombilla de bajo consumo encendida todo el día.
¿Cómo reducir tu huella digital?
–Reduce el tamaño de los documentos que envías por correo electrónico. De igual forma, responde a los correos electrónicos sólo cuando sea estrictamente necesario e intenta evitar mensajes cortos como un simple: «Recibido» o «Muchas gracias».
–Borra los mails que ya no sean relevantes para ti. Liberarás mucho espacio en tu correo y reducirás la carga de trabajo de la central de datos.
–Date de baja de aquellas newsletters que no leas cuando las recibes.
–Reduce el tamaño y resolución de las imágenes que subes a redes o a tu web. Una resolución de 72 ppp es más que suficiente para internet.
–Utiliza el buscador Ecosia. Con tus búsquedas, estarás plantando árboles de forma indirecta.
–Haz limpieza en tus dispositivos. Borra todo aquellos documentos e imágenes que ya no necesites, tanto de la nube como de la galería de tu móvil. Conseguirás que rinda mejor.
–Optimiza el uso de energía de tus dispositivos. Activa el modo ahorro en tu móvil, tendrás que ponerlo a cargar menos veces.
–Borra publicaciones de tus redes sociales, aquellas que han dejado de ser relevantes para ti. De igual forma, busca en la configuración de tus redes dónde están almacenadas tus historias y publicaciones y borra todas aquellas que ya forman parte del pasado.
–Desinstala todo aquello que no utilices.
–No utilices la nube si no es necesario. Almacena tus fotos personales en dispositivos externos como discos duros o similares, de esta forma, tu material no estará provocando una energía continúa sino sólo cuando conectes tu disco duro al pc.